domingo, 25 de noviembre de 2018

IDA VITALE: PREMIO CERVANTES 2018

Queridos amigos:


Nosotros ya la queríamos y la celebrábamos, y ahora resulta que le conceden el Premio Cervantes 2018

Ida Vitale, nuestra flamante ganadora del Premio Cervantes 2018

Y es que ya no podemos congratularnos más.

Estamos de enhorabuena con Ida Vitale reconocida y premiada y siempre cerca de sus versos. 

Ya daremos buena cuenta de su discurso y celebración en la recogida del Premio, y mientras tanto, nos remitimos, cómo no, a la entrada que le dedicábamos hace muy poco tiempo en nuestro blog de Animación a la lectura

Rescatemos algunos de sus poemas, no nos cansamos. ¿No os parece?


Christophe Vacher

Agosto, Santa Rosa

Una lluvia de un día puede no acabar nunca,
puede en gotas,
en hojas de amarilla tristeza
irnos cambiando el cielo todo, el aire,
en torva inundación la luz,
triste, en silencio y negra,
como un mirlo mojado.

Renz Baluyot


Deshecha piel, deshecho cuerpo de agua
destrozándose en torre y pararrayos,
me sobreviene, se me viene sobre
mi altura tantas veces,
mojándome, mugiendo, compartiendo
mi ropa y mis zapatos,
también mi sola lágrima tan salida de madre.


Renz Baluyot

Miro la tarde de hora en hora,
miro de buscarle la cara
con tierna proposición de acento,
miro de perderle pavor,
pero me da la espalda puesta ya a anochecer.
Miro todo tan malo, tan acérrimo y hosco.


Kate Pfeiffer


¡Qué fácil desalmarse,
ser con muy buenos modos de piedra,
quedar sola, gritando como un árbol,
por cada rama temporal,
muriéndome de agosto!


Christophe Vacher


De un fulgor a otro

Quizás no se deba ir más lejos.
Aventurarse quizás apenas sea
desventurarse más,
alejarse un atroz infinito
del sueño al que accedemos
para irisar la vida,
como el juego de luces que encendía,
en la infancia,
el prisma de cristal,
el lago de tristeza, ciertas islas.


Carl Larsson


Sí, entre biseles citados los colores,
un fulgor anidaba sobre otro
-seda y deslumbramiento
el margen del espejo-
y aquello también era un espectro,
sabido, exacto. Centelleos ajenos
en un mundo apagado.


Alison Hill

Como un canto sin un cuerpo visible,
un reflejo del sol creaba
una cascada un río una floresta
entre paredes áridas.


Carl Larsson


Sí, no vayamos más lejos,
quedemos junto al pájaro humilde
que tiene nido entre la buganvilia
y de cerca vigila.
Más allá sé que empieza lo sórdido,
la codicia, el estrago.



Safet Zec

Estar solo

Un desventurado estar solo,
un venturoso al borde de uno mismo.
¿Qué menos? ¿Qué más sufres?
¿Qué rosa pides, sólo olor y rosa,
sólo tacto sutil, color y rosa,
sin ardua espina?



Fernando Lavoz


Llamada viva

Ponerse al margen
asistir a un pan
cantar un himno

menoscabarse en vano
abrogar voluntades
refrendar cataclismos






















acompañar la soledad
no negarse a las quimeras
remansarse en el tomado

ir de lo ceñido a lo vasto
desde lo opaco a la centella
de comisión al sueño libre


Stanislav Krupp

ofrecerse a lo parco del día
si morir una hora tras otra
volver a comenzar cada noche

volar de lo distinto a lo idéntico
admirar miradores y sótanos
infligirse penarse concernirse

estar en busca de alma diferida
preparar un milagro entre la sombra
y llamar vida a lo que sabe a muerte.


Stanislaw Krupp



Los compases heredados
                                                                 A Adolfo Nigro

No te amargues el mar,
acompásate con la hora que,
involuntario y cruel, nadie trasmuta;
ríete de los antológicos traspiés
del mínimo común nominador,
de todo el trafalgar
en que un traidor se anega.
Prémiate con recordar que siempre
huiste de él como de un eufonium.


Corey Bond

¡Enhorabuena, Ida Vitale! Tus palabras nos hacen mejores y más felices siempre.

...

sábado, 20 de octubre de 2018

ALDA MERINI: AMOR


Queridos amigos:

Vamos a homenajear a una grandísima escritora, Alda Merini (Milán, 1931-2009). El próximo 1 de noviembre recordaremos la fecha en la que la perdimos, hará 9 años.


Alda Merini





Alda Merini, una poetisa que se asoma a nuestro centro y nos hace temblar, llorar, temblar, amar... No nos dejará indeferentes. Pareciera que un antes y un después rozara nuestras vidas, algo nos ha tocado el interior de manera contundente después de leer a Alda Merini, de estremecernos con su vehemencia amatoria y soñadora.
Su acercamiento a la religiosidad y a la mística, paralelamente a un sentimiento de entrega amorosa, su vulnerabilidad emocional, sus recurrentes internamientos hacen de Alda una figura gigante en su creación, propiciada precisamente por su íntima fragilidad.


Alfredo Araujo Santoyo

Sobran las palabras de presentación, son las de Alda, las que lo ocupan todo. ¿No os parece, queridos amigos?

Pues aquí tenéis un breve exposición de tan intensa obra. Espero que la disfrutéis y la viváis con toda la profundidad que ella nos regala.


Monika Helgesen

En todas partes,
aun si estuvieras completamente desnudo
o completamente cubierto
o completamente loco,
te veía ascender las colinas de mi origen
y no sé
tan enamorada como estoy
cómo hiciste para conocerme
y quién te hizo entrar en mí.

Andrei Buryak

Eres una hoja,
un trazo abstracto
que se eleva como una cometa
que arroja puñados de sal
en mis heridas abiertas,

Alfredo Araujo Santoyo

mas no importa:
es siempre salsedumbre de aquella mar
llena de corales, peces,
tal vez de muertos e infinitos submarinos.

Andrei Buryak

Lo que me dices no tiene importancia,
ninguno de los dos nos escuchamos
pues nuestras peticiones descendieron a un mundo
donde vivíamos sólo tú y yo

Andrei Buryak

en compañía de un amor
que jamás cuestionarán
pues con nadie lo hemos hablado.
De Carne de ángel. Versión de Jeannette L. Clariond 


Monika Helgesen




Un amigo

¿Qué es un amigo?
Una masa de carne
adentro con un hilo de alma
que te mira con miles de ojos
y te sientes perseguido.


Michael Taylor


No es amor solamente,
es uno que ha comprendido
que el verdadero enemigo del hombre es la vida
y la quiere estrangular,
y te mata también a ti,
por confusión de amor.

Alfredo Araujo Santoyo


Huida de loba


A quien me pregunta
cuántos amores he tenido
le respondo que mire
en los bosques para ver
en cuántas trampas ha quedado
mi pelo.



Monika Helgesen




El beso

Qué flor me nace sobre la boca
apenas me miras
y temes ser despedazado.
Inundaciones imprevistas
son tus ojos ardientes
pero la flor no quiere morir
se queda allí sin carne
a esperar la muerte.


Aris Kalaizis



El rostro

Vieras el rostro de mi alma
cuando te veo y tiemblo
y se vuelve hoja de escucha.
Vieras el dedo de mi corazón
que te indica caminos desconocidos.
Vieras mi amor
que es tierno hijo
que crece sin padre.

De Clínica del abandono. (Traducciones de Delfina Muschietti).


Monika Helgesen



CANTO DE RESPUESTA


Haber estado en ciertos lugares tristes,
cultivar fantasmas,
como dices tú, atento amigo mío,
no da derecho a creer que dentro
dentro de mí continúe la locura.

Aris Kalaizis


He seguido siendo poeta hasta en el infierno
sólo que yo buscaba de Eurídice
la casta sombra y no tengo más palabras...

Aris Kalaizis


Ésta, Franco, la tierna respuesta
a tu dilema: yo soy poeta
y poeta seguí siendo tras los barrotes;



Andrei Buryak


sólo que afuera, sin casa y perdida
he continuado a mi pesar el canto
de la tristeza, 


Camille Hagner

y dentro de cada flor
de mi voz existe aún la esperanza
de que nada haya sucedido que devaste
mi surco de luz y haya perdido
la verdadera llave que me cierra a la verdad.





Andrei Buryak




LOS POETAS TRABAJAN DE NOCHE

Los poetas trabajan de noche
cuando el tiempo no les urge,
cuando se calla el ruido de la multitud
y termina el linchamiento de las horas.

Los poetas trabajan en la oscuridad
como halcones nocturnos o ruiseñores
de canto dulcísimo
y temen ofender a Dios.

Pero los poetas, en su silencio,
hacen mucho más ruido
que una dorada cúpula de estrellas.





Tracey Harris




SOY UNA MUJER
(a Salvatore Quasimodo)

Soy una mujer que desespera
que no encuentra paz nunca en ningún lugar,
a la que la gente desprecia, a la que los paseantes
miran con despecho y con furor;
soy un alma colgando de una cruz
pisoteada, burlada, escupida:
me han quedado sólo los ojos
que yo elevo al cielo a Ti gritando:
¡quítame del regazo cada suspiro!




Alfredo Araujo Santoyo





HE SENTIDO MIEDO DE LA MUERTE
A Héctor

He sentido miedo de la muerte,
miedo de tus paraísos.
Tú eras mi abeja,
te apoyabas sobre mí
con tu benevolencia
y chupabas la flor de mis rimas
todo el tibio coraje.
Tú eras mi hermano
y eras también poeta...
Pero perderte así,
por banal alegría,
por la muerte burlona,
oh compañero de sueños,
¡qué no habría hecho!




Samet Dogan


No soy mujer de llorar las estelas
ni los silencios de los cementerios;
yo soy mujer de amor,
y tú lo sabes bien
qué no habría hecho.




Samet Dogan

Te habría perseguido en los sueños,
lo sé, y luego lentamente
habría resbalado en el sueño,
en el sueño de la locura
y allí, amándote siempre,
yo habría muerto de amor.



De Destinados a morir. Traducciones de Roberto Martínez Bachrich.



Hugo Ayvar



YO ERA UN PÁJARO

Yo era un pájaro
de vientre blanco y gentil,
alguien me cortó la garganta
para reírse
no sé.



Michael Taylor

Yo era un gran albatros
y volaba sobre los mares.
Alguien detuvo mi viaje,
sin ninguna caridad de sonido.
Pero también echada por tierra
yo canto ahora para ti
mis canciones de amor.




Hugo Ayvar




HE CAÍDO EN UNA TRAMPA PROFUNDA

He caído en una trampa profunda
como dentro de un pozo empantanado.
Oh ¿quién podrá salvarme de esta imagen sagaz
que ensombrece un móvil amor?




Daryl Zang


En el fondo del pozo hay juncos de sombra
y mi grito domina las aguas.
El robusto camaleón mira desde las hórridas plantas
este secreto precipicio mío.




Hugo Ayvar



QUIZÁS SE NECESITA SER MORDIDOS

Quizás se necesita ser mordidos
por una abeja venenosa
para mandar mensajes
y rogarle a las piedras
que te manden luz;




Samet Dogan

por esto yo descendí
 los jardines del manicomio,
por esto de noche saltaba
los recintos prohibidos
y robaba todas las rosas
y después...




Samet Dogan

antes de morir a mi día
o noche, o larga noche
de soledad ausente,
o devastados jardines
donde yo sola vivía
porque mañana estaría
muerta todavía de horror
pero la noche, oh la noche
en los jardines del manicomio
veces yo hacía el amor
con un desesperado como yo
en una gruta de horror.




Hugo Ayvar


CUANDO ENTRÉ

Cuando entré
tres ojos me recogieron
dentro de sus esferas,
tres ojos duros enloquecidos
de enfermas dementes:
entonces yo perdí los sentidos
entendí que aquel lago
azul era un pantano
cenagoso de desperdicios triturados
en el que me ahogaría.

De La Tierra santa. Traducciones de Roberto Martínez Bachrich.




Hugo Ayvar


Traspasados por esta inmensa belleza desgarrada de Merini, compartamos estos recitales y vídeos sobre  nuestra poetisa querida.


AL AMOR NO SE PUEDE RESISTIR





El siguiente vídeo lo encontramos en su original italiano, pero el testimonio es tan extraordinario que podemos disfrutarlo directamente desde nuestra poetisa, candidata, en efecto, al Premio Nobel.





Queridos amigos, me esperáis ávida, como es tradición, de vuestras sensaciones y comentarios.
Un beso muy fuerte para todos.


Hasta pronto.