Queridos amigos:
Me siento en un emotivo reencuentro con todos vosotros al escribir esta entrada. Ahora se trata de brindarle su protagonismo al arte. Pues que venga de la mano de un grande, de un cantaor genial, poeta y hombre comprometido con el arte, con la sociedad y con la vida.
Juan Pinilla es una persona tan sencilla, cercana y espontánea que a una se le olvida que sea el gran músico que ha adaptado a poetas de los considerados clásicos en la historia, y a otros actuales que formarán parte de la misma.
El conocimiento y las ganas de investigar, la inquietud por saber, por leer, por escribir, por componer, por cantar... caracterizan a Juan Pinilla y nos encandilan a todos nosotros.
Es una tarea ingente referirme a este artista con todos sus méritos; por ello, solo voy a intentar hacer pequeñas escalas en algunas de sus facetas y disfrutar de su espíritu creador.
Gracias, Juan Pinilla por ser como eres, por estar siempre tan cerca y por tu grandeza absoluta y extraordinaria. ¡Va por ti, maestro!
Son tantos los premios y reconocimientos, que es difícil exponer un currículum completo con todos sus galadardones, preferiría limitarme a sentir alguno de ellos.
Así:En 2007 se alza con la prestigiosa Lámpara Minera del concurso del Festival Internacional del Cante de las Minas de la Unión (Murcia)
El granadino, de Huétor Tájar, anunciaba sus ganas de trabajar y de superarse, pero, sobre todo, además de su conocimiento y su sensibilidad exquisita, su compromiso con los más desfavorecidos, como los mineros.
Este galardón ya nos da buena cuenta de su arte, de su genio, de su técnica, de su juventud sabia, añeja en conocimiento y de sus ganas de transmitirlo.
Lo más cautivador de nuestro joven y magistral artista es el conocimiento y el interés tanto por figuras históricas del flamenco como Cobitos o la Niña de los peines, como personajes literarios, cómicos y cinematográficos como Groucho Marx o Woody Allen.
Ahora bien, creo que no me equivoco, si afirmo con toda mi admiración, que si algo ama Juan Pinilla sobre todas las cosas del mundo es la poesía, y a ella acerca su palabra y su cante.
Así que disfrutemos de su recreación de los artistas en los siguientes vídeos.
Estas bulerías dedicadas a la pintura y a la misma recreación ascética o cuasi mística del espíritu, a través de textos del pintor Ramón Gaya y del gran poeta José Hierro pertenecen precisamente a su disco de 2007 "Lámpara minera".
Este es el extraordinario poema de José Hierro. El alma se extasía de alegría al encuentro con Juan, ¿no creéis?
Me tendí sobre la hierba entre los troncos
que hoja a hoja desnudaban su belleza.
Dejé el alma que soñase:
volvería a despertar en primavera.
Nuevamente nace el mundo,
nuevamente naces, alma ─estabas muerta─;
que hoja a hoja desnudaban su belleza.
Dejé el alma que soñase:
volvería a despertar en primavera.
Ramon Gaya |
Nuevamente nace el mundo,
nuevamente naces, alma ─estabas muerta─;
yo no sé lo que ha pasado en este tiempo,
tú dormías, esperando ser eterna.
Y por mucho que te cante
tú dormías, esperando ser eterna.
Y por mucho que te cante
la alta música de las nubes,
y por mucho que te quieran
explicar las criaturas
explicar las criaturas
por qué evocan aquel tiempo negro y frío,
aunque pretendas
hacer tuya tanta vida derramada
─era vida y tú dormías─,
hacer tuya tanta vida derramada
─era vida y tú dormías─,
ya no llegas a alcanzar la plenitud de su alegría;
tú dormías cuando todo estaba en vela.
Tierra nuestra, vida nuestra, tiempo nuestro.
tú dormías cuando todo estaba en vela.
Tierra nuestra, vida nuestra, tiempo nuestro.
(De "Agenda", 1991)
Ramón Gaya |
Ahora si lo que queréis es disfrutar de su conocimiento pleno del mundo flamenco, de los palos, pues no dudéis en disfrutar de esta maravillosa conferencia que no se deja ni una notita flamenca fuera, ole:
La maestría de Juan se desgrana también haciendo verso la prosa. Así, en estas palabras De Francisco Umbral, de la novela "Mortal y rosa", obra que el gran escritor escribió ante el dolor de la muerte de su pequeño hijo Pincho de cinco años por una leucemia.
La vida de un ser humano cambia después de escuchar la música que hizo Pinilla de las palabras de Umbral:
En el concierto "La voz y la palabra" nos ofrece junto a Enrique Moratalla un paseo poético increíble, a través del ayuntamiento de Córdoba en 2016. Quedémonos con este momento lorquiano: "Gacela del mercado matutino":
Gacela del mercado matutino
Por el arco de Elvira
quiero verte pasar,
para saber tu nombre
y ponerme a llorar.
¿Qué luna gris de las nueve
te desangró la mejilla?
¿Quién recoge tu semilla
de llamarada en la nieve?
¿Qué alfiler de cactus breve
asesina tu cristal?
Por el arco de Elvira
voy a verte pasar,
para beber tus ojos
y ponerme a llorar.
¡Qué voz para mi castigo
levantas por el mercado!
¡Qué clavel enajenado
en los montones de trigo!
¡Qué lejos estoy contigo,
qué cerca cuando te vas!
Por el arco de Elvira
voy a verte pasar,
para sentir tus muslos
y ponerme a llorar.
Federico García Lorca |
Y claro ya que hablamos de este concierto, imposible sería sustraernos al encanto y al genio del humor al que lleva su arte Juan Pinilla en esta canción, casi de chirigota, pero con palabras y citas extraordinarias del mundo del cine. Eres un genio, Juan.
Después de esta breve pero sentida semblanza sobre la obra de nuestro Juan Pinilla, sobre todo, quisiera decir que "en 2011 la editorial "Atrapasueños Editorial" publicó "Las voces que no callaron" disco-libro que estudia y reivindica el compromiso político y social de tantos artistas de flamenco. Aquí encontráis una entrevista donde Juan nos explica el contenido de su investigación creadora.
Gracias por tu compromiso, tu estudio, tu arte, por sentirte tan cerca y porque has accedido a visitarnos desde la humildad y la sencillez más cautivadoras.
Te queremos, Juan, te queremos mucho. Gracias, artista, por darnos tanta grandeza.
Muchas gracias, Juan Pinilla, querido, simplemente gracias.
Enhorabuena por seguir llevando la cultura en forma de cante al centro de adultos. Seguro que habrá sido un encuentro especial. Joaquín.
ResponderEliminarQuerido Joaquín:
EliminarEstamos deseando gozar de la visita de nuestro querido Juan Pinilla. La emoción viene de la mano de su disposición para encontrarse con nosotros. Muchas gracias por tu sensibilidad y tus ganas de disfrutar del buen cante y de la poesía, compañero. Te esperamos por aquí el 7 de febrero, que promete brindarnos un encuentro muy especial.
Un beso.
Por fin, Elena, por fin lo has conseguido.
ResponderEliminarQué placer contar con la presencia de un maestro de tal envergadura y todo gracias a TÍ.
Han sido tantas clases maravillosas en las que nos has "puesto"/enseñado el arte del maestro Pinilla, que el poderle "tener" en vivo y en directo va a ser todo un orgullo y placer.
Gracias Elena por la dedicación en todos los sentidos.
Va para ti éste poema:
A UNA ROSA
XXXVI
¡Con qué artificio tan divino sales
de esa camisa de esmeralda fina,
oh rosa celestial alejandrina,
coronada de granos orientales!
Ya en rubíes te enciendes, ya en corales,
ya tu color a púrpura se inclina
sentada en esa basa peregrina
que forman cinco puntas desiguales.
Bien haya tu divino autor, pues mueves
a su contemplación el pensamiento,
a aun a pensar en nuestros años breves.
Así la verde edad se esparce al viento,
y así las esperanzas son aleves
que tienen en la tierra el fundamento...
LOPE DE VEGA
Un abrazo de luz enorrrrrme, Hija de Júpiter.
Querídisima y admirada Hija de Júpiter:
ResponderEliminarEs un privilegio tener tan cerca al Maestro y ha sido gracias a su humildad y calor y, no lo olvides, a personas como tú, que están dispuestas a beber de su arte, y... querida mía, que me han empujado a tener el coraje de intentarlo, si no, habría sido imposible. Así que, gracias a ti, inteligente y bella diosa, que simbolizas la sabiduría, la de los ojos glaucos, estirpe de Júpiter.
Con qué ganas lo vamos a recibir. Estoy segura de que con este amor por la poesía y por los versos preciosistas, como estos de Lope de Vega, nuestro Juan Pinilla se va sentir acogido, como en casa, pues es la casa del arte la que lo recibe , no me cabe ninguna duda, después de leer estas palabras a una rosa.
Pues para ti, y ya que hablas de una rosa, querida hija de Júpiter, este poemita sencillo, precioso, de inspiración popular que canta por fandangos "El niño de la Rosa", amigo de Blas Infante, y al que nuestro Juan Pinilla rinde homenaje con su belleza técnica y de alma, en su cante y en su creación, y dice así:
"Entré en un jardín por flores,
y no encontré la que yo quería;
la que a mí me gustaba
la quitaron aquel día
y en la rama ya no estaba.
El querer por el dinero
son castillos en el aire;
el cariño verdadero
no reconoce caudales
y es más firme que el acero.
El cariño de una mare
no tiene comparación;
pues cuando se muere un pare
ella vende hasta su honor
pa que sus hijos ná les falte."
Espero que te haya gustado, tanto como a mí el del Fénix de los ingenios, don Lope de Vega.
Un abrazo de luz enorme.