Queridos amigos:
El próximo 15 de octubre se celebra el aniversario del nacimiento de uno de nuestros más celebrados, interesantes e intensos escritores, nuestro querido poeta Agustín García Calvo (Zamora, 1926 - 2012).
Destacado pensador y filólogo, se vio sometido por la represión franquista y separado de su cátedra en la que ejercía como profesor en la Universidad Complutense de Madrid, en 1965, debiendo exiliarse en París. Hasta 1976 no fue restablecido en su cátedra, en la que permaneció hasta su jubilación en 1992.
Formó parte, asimismo, del Círculo Lingüístico de Madrid junto a autores tan reconocidos como Rafael Sánchez Ferlosio.
Pensador, filólogo, dramaturgo y poeta polémico, así como profesor heterodoxo, defendió apasionadamente el papel del pueblo contra la opresión del poder, sumándose a movimientos como el del 15M.
Su obra obtuvo el reconocimiento de premios tan prestigiosos, como: el Premio Nacional de Ensayo en 1990 por Hablando de lo que habla. El Premio Nacional de Literatura Dramática en 1999 por La Baraja del rey don Pedro. O el Premio Nacional al conjunto de la obra de un traductor en 2006.
La obra poética de nuestro autor ha sido objeto de variadas y conocidas versiones musicales, como las de Chicho Sánchez Ferlosio o Amancio Prada.
¿No estáis deseando disfrutar de ellas?
Un maravilloso homenaje a todas las mujeres nos regala en su invitación a que gocemos de la vida, sin permitir a nadie que rompa nuestras alas o condene nuestra libertad.
Querido Agustín..., que ¿por qué te queremos tanto?
LIBRE TE QUIERO
Libre te quiero,
como arroyo que brinca
de peña en peña.
como arroyo que brinca
de peña en peña.
Volodia Popov |
Pero no mía.
Grande te quiero,
como monte preñado
de primavera.
Pero no mía.
Grande te quiero,
como monte preñado
de primavera.
Pero no mía.
Volodia Popov |
Buena te quiero,
como pan que no sabe
su masa buena.
Pero no mía.
como pan que no sabe
su masa buena.
Pero no mía.
Volodia Popov |
Alta te quiero,
como chopo que en el cielo
se despereza.
Pero no mía.
como chopo que en el cielo
se despereza.
Pero no mía.
Volodia Popov |
Blanca te quiero,
como flor de azahares
sobre la tierra.
Pero no mía.
Volodia Popov |
Pero no mía
ni de Dios ni de nadie
ni tuya siquiera.
Volodia Popov |
Y a continuación podéis disfrutar de este extraordinario poema en la bellísima versión de Amancio Prada, ¿no os parece que lo es?
De Canciones y soliloquios: Tú, cuya mano
¿No es esta, acaso, una declaración de amor, que desafía a las leyes del corazón más fuerte e imperturbable?
TÚ, CUYA MANO
Tú, cuya mano me ha bañado
de un fuego transparente las espaldas,
cuyos ojos en claros naufragios hundieron
algunos principios elementales de mi alma,
tú eres mi patria.
Volodia Popov |
Tú, que no tienes apellido,
que no sé si eres pájaro o si alcándara,
que de todos tus brazos las letras de plomo
cayéndose han ido, como si fueran nueces vanas,
tú eres mis padres
y mi patria.
Tú, que ni tú te acuerdas dónde
tendiste a orear las nubes blancas,
que de tantos amores que tienes confundes
el nombre de todos los días de cada semana,
tú eres mi Dios
y mis padres
y mi patria.
Paul S. Brown |
Tú, que tan dulcemente besas
que el cielo bocabajo se volcaba,
y que no se sabía de quién ya la lengua,
de quién la saliva, de puro sabrosa y templada,
tú eres mis leyes
y mi Dios
y mis padres
y mi patria.
Paul S. Brown |
Tú, que apacientas calaveras
por las praderas de la verde África
y a los rojos leones les echas de pasto
las rosas de leche de luna de Nuruquimagua,
tú eres mi ejército
y mis leyes
y mi Dios
y mis padres
y mi patria.
Paul S. Brown |
Eres mi ejército y mis leyes
y mi Dios y mis padres y mi patria,
y el ejército y Dios y las leyes y todas
las patrias y padres se creen que tú no eres nada:
que no eres nada.
Paul S. Brown |
Cuando todos nuestros ídolos caen ante la fuerza de las relaciones humanas y el amor es el que le da la razón a la existencia. Poesía que nos aclara el sentido de la vida. ¿No creéis?
Y he aquí, la preciosa versión de este poema por Chicho Sánchez Ferlosio:
Y si pensáramos en el mundo que ya no hemos de vivir. ¿Quién sabe cómo será? Al menos, podremos imaginar cómo nos gustaría que fuera. Bonita ilustración en verso de un futuro soñado con el corazón.
Ingrid Tusell |
EL MUNDO QUE YO NO VIVA
El mundo que yo no viva
lo pensé como cosa extraña,
como arca de maravilla.
Ay, de mi vida.
Ingrid Tusell |
Allí ¿sonará la lluvia
junto al fuego las noches frías?
¿Tendrá agosto en el río barcas?
Y tú ¿la gentil sonrisa?
¿Brillará en el papel que siembro
la negra flor de la tinta?
Ay, de mi vida.
Ingrid Tusell |
los amigos y que "Era" digan
"un hombre, y te quiso mucho"
y "Mucho" llorando digas?
Ingrid Tusell |
Es el mundo que no conozco,
Atlántida sumergida.
Ay, de mi vida.
Ingrid Tusell |
Allí las palmeras echan
esmeraldas. Allí las crías
del delfín esmeraldas pacen.
Allí no hay noche ni día:
cuando ordeñan a los rebaños,
de púrpura el mar se agría,
Ay, de mi vida.
Ingrid Tusell |
Más limpio que agua de oro
es el mundo que yo no viva:
no hay naves de arar espumas
ni arado para las viñas;
el gran árbol le da su fruto
al que el nombre del fruto diga.
Ay, de mi vida.
Ingrid Tusell |
Ese mundo no es el mío,
es el tuyo: el que en tus pupilas
hundido está desde siempre
y no lo alcanza mi vista.
A ese mundo quisiera entrar,
antes que suene la hora.
Ay, de mi vida.
Ingrid Tusell |
Y, por supuesto, la maravillosa versión de Amancio Prada con Chicho Sánchez Ferlosio:
Mirad, en este poema, qué mirada tan desacomplejada, descarada y a la par tierna y enternecedora hacia el mundo que nos rodea, nuestros hábitos, nuestros objetos cotidianos... nuestros miedos, nuestros amores, nuestros sentimientos:
NO TENTAR A LA MALA SUERTE
Ser un mal poeta,
fatal si es necesario,
y por la mañana levantarte muy tarde,
Dean Fisher |
alargar los versos
como quien acumula piedrecitas
y después las lanza a la marea,
como quien acumula piedrecitas
y después las lanza a la marea,
Dean Fisher |
y por la noche levantarte aún más tarde,
y después las lanza a la resaca,
y después las lanza a la resaca,
Dean Fisher |
escoger una palabra al azar
y dar vueltas y más vueltas
por la ciudad, junto a ella,
cogiditos de la mano,
y dar vueltas y más vueltas
por la ciudad, junto a ella,
cogiditos de la mano,
Igor Bitman |
escoger una palabra gigante,
como, por ejemplo, hermafrodita,
y pasearla junto a ti
por en medio de las multitudes desacostumbradas,
como, por ejemplo, hermafrodita,
y pasearla junto a ti
por en medio de las multitudes desacostumbradas,
Añadir leyenda |
y después levantarte muy tarde
en la mañana, y que ella ya no esté,
en la mañana, y que ella ya no esté,
Igor Bitman |
lavarte los dientes y las manos,
sentarte a escribir y esperar,
Igor Bitman |
esperar, cansarte de esperar,
limpiar el polvo y hacer la cama,
limpiar el polvo y hacer la cama,
Igor Bitman |
descubrir bajo la mesa
cientos
de objeciones muertas
cientos
de objeciones muertas
Sebastian Walter-Lilienfein |
y un despertador enajenado
que gira y gira, impasible
ante tus horas de sueño o de insomnio.
Y, a manera de aforismo, estos versos que nos taladran, directos a lo más hondo de nuestros sufrimientos, los del alma:
que gira y gira, impasible
ante tus horas de sueño o de insomnio.
Añadir leyenda |
Y, a manera de aforismo, estos versos que nos taladran, directos a lo más hondo de nuestros sufrimientos, los del alma:
CORTOMETRAJE
No podemos fingir el dolor,
el dolor nos finge a nosotros.
Igor Bitman |
El amor, y los problemas de comunicación, los altibajos emocionales y el miedo a perder los momentos de serenidad amparados por el amor:
PALABRAS
Amamos la mentira,
dime,
dime amor, dime
qué sueño te ha de desvelar.
Igor Bitman |
Mientras nos amamos,
callas,
dime, dime amor,
dime las mentiras que sigo queriendo
escuchar.
Roberta Serenari |
Amo el silencio
que me clavas,
dime,
dime amor,
no me digas aún
cómo atas mis zapatos
al borde del desierto, cómo recelas de mí
cada vez que te hablo.
Amamos la mentira,
te digo,
te digo amor,
te digo,
te digo amor,
Sebastian Walter-Lilienfein |
cada vez que consigues alzarme
para después negar,
asombrado,
que tras esta noche, habrá una caída.
Sebastian Walter-Lilienfein |
Este extraordinario, conciso e intenso homenaje a Luis Cernuda, nuestro querido poeta de la generación del 27, no deja como en alma estremecida:
Sebastian Walter-Lilienfein |
A LA MANERA DE CERNUDA
La materia es de papel.
El hombre es de papel.
Los sueños son de papel y están escritos.
Sólo el aire escapa a cualquier designio.
Sebastian Walter-Lilienfein |
Que la lírica marque el camino, para llegar ahora a sus ensayos, reflexiones, sentimientos en prosa, como la siguiente heterodoxa declaración antibelicista. García Calvo nos confiesa su disconformidad ante un Dios terrible y vengador que dicta sus actos en nuestro mundo desde la guerra y no desde la paz.
Sebastian Walter Lilienfein |
NO PAZ, SINO GUERRA A LA GUERRA
Abril 1996
Hay una equivocación de raíz en las proclamaciones y reclamaciones de Paz y "Paz entre los hombres de buena voluntad", que una vez y otra domina y asimila las buenas intenciones y los deseos más fervientes de los que esos clamores de Paz surgían.
Pues, ¿a quien se elevan esas reclamaciones? ¿A qué Dios se pide la Paz?.
Basta dejarse latir un poco para sentir que se le pide al Señor de los Ejércitos, al Dios para quien la guerra es una necesidad constitutiva.
O, si no, echemos una mirada alrededor: aquí, en el estado del Bienestar, perfección de la Historia entera, gozamos de paz desde hace medio siglo; esta Paz se alimenta, primero, por una serie de guerritas en el cinturón de los alrededores (Vietnam y Corea para empezar); después, peleas de árabes y judíos en Oriente Próximo; después, remociones en Centroamérica o riñas de tribus en África; luego, a falta de mejor pasto, la guerra televisiva del Irak; al fin, tras el derrumbe de la división entre las dos Democracias con que nos habían tenido entretenidos 40 años, la resurrección, en los arrabales más cercanos, de las brasas de guerra arcaica de los Balcanes), y, segundo, en el seno del propio Estado del Bienestar, por el mantenimiento, también constante, de luchas de bandas terroristas, mafiosas, neofascistas, o sencillamente de siervos de la violencia, matones y policías, esto es buenos y malos, de cuyos modelos las películas televisivas no han dejado de nutrir a las sucesivas generaciones.
Y en medio de esto, las almas inocentes reclaman a lo Alto paz, paz, por ejemplo, para el año 2000, armonía de los estados y de las personas. Pues bien, quien no vea que la Paz es esta guerra, que la armonía es esta discordia organizada desde arriba, no hará mas que contribuir a la misma con su clamor de Paz, pues que en este clamor mismo está conformándose con la falsa Paz que los Medios del Poder le venden.
El verbo encarnado ha dicho "no creáis que he venido a meter paz en la tierra: no he venido a meter paz, sino espada". La sola paz de veras que nos cabe es la guerra contra la guerra, es decir contra el Dinero y el Estado, que necesita la guerra (y la Fe en la Paz) para sostener su Poder, que es el poder de administrar la muerte, en paz y en guerra.
Sebastian Walter-Lilienfein |
Menudo viaje nos hemos concedido, queridos amigos, de la mano de Agustín García Calvo. Aquí queda un pequeño testimonio de su mirada al mundo, y de sus sugerencias en la crítica hacia el poder y a un mundo que destruye al ser humano, el cual tiene en su sentimiento, al menos, la posibilidad de hacerlo un poquito más habitable. Sea, con sus poemas.
Esperamos ansiosos vuestras sensaciones y vuestros comentarios.
Hasta pronto, un beso....
Precioso el poema de "libre te quiero" y más bello todavía, si cabe, en la versión de Amancio Prada.
ResponderEliminarQuerida Yolanda:
ResponderEliminar¡Qué alegría tenerte por aquí, querida!
Con esa imagen del mar, de la belleza y de la libertad que nos traes, cualquiera se resiste a esta idea del poema de García Calvo "Libre te quiero". Coincido en tu sentimiento, qué belleza de versos y qué maravilla de versión musical.
Para ti, querida Yolanda, estas palabras de García Calvo sobre la libertad y dicen así:
"Eso: el no saber qué: la duda, la incertidumbre: eso es la libertad. Y si te parece poca… "
Un besito muy grande, querida, es un lujo tenerte por aquí.
Hasta pronto.