viernes, 22 de noviembre de 2013

PABLO NERUDA Y LA BELLEZA DE SUS VERSOS


Queridos amigos:

En esta ocasión no puedo sustraerme al encanto de la novela Ardiente paciencia de Antonio Skármeta, llevada al cine por Michael Radford como Il postino o El cartero y Pablo Neruda.



 


Hoy he tenido la oportunidad de disfrutar de ella con personas maravillosas que han logrado convertir una película hermosa en toda una experiencia literaria, cinematográfica y humana. Muchas gracias a todos.

La película está basada en la figura real de Pablo Neruda, nuestro bien querido y admirado poeta chileno, Premio Nobel de Literatura en 1971.



Pablo Neruda, un gigante premiado con el Nobel
 

La película nos lleva a la ficción durante su exilio político de Chile.  Por supuesto es una recreación de la literatura al cine. Pero más allá de todas las licencias inventadas, la creación refleja con fidelidad artística el alma y el corazón de un poeta que se cruza con un persona humilde que aprende a idolatrarle, y a amar a su vez la poesía hasta convertirse en poeta y en hombre comprometido con la política.


El argumento es bien sencillo: Conocemos a Mario Ruoppolo, un joven, hijo de pescador acostumbrado a vivir en la humildad del sur de Italia y en la precariedad de su pueblo. Un buen día le surge trabajo como cartero pues Pablo Neruda ha decidido refugiarse en ese entorno privilegiado de la costa italiana en uno de los momentos de su exilio. Mario estará encargado de llevarle las cartas únicamente a Pablo Neruda. Así surge la admiración hacia el poeta y una gran amistad entre ambos.




Mario se enamora perdidamente de una muchacha hermosísima y muy joven: Beatrice Russo, que vive con su tía y trabaja de camarera. No parece tener ninguna oportunidad de romance con ella. Por eso nuestro Mario le pedirá ayuda al gran poeta, Neruda.




Así en efecto, a través de la poesía, de las maravillosas palabras nacidas de Neruda, que Mario le recitará a Beatrice, logrará cautivar a la joven. Y ambos vivirán una divina pasión rodeada de romanticismo y lírica. Eso sí, primero su tía se tendrá que asegurar de que el joven Mario no tiene malas intenciones con su sobrina.




cuando un  hombre empieza a tocarte con las palabras, en seguida llega muy lejos con las manos... Bien conocía la tía de Beatrice el poder de las palabras, no digamos si vienen envueltas en metáforas, ¡qué momento!, ¿verdad?








Pero la pasión entre Mario y Beatrice triunfa y será Neruda precisamente el padrino de su boda.

 



  Es más, nacerá Pablito, ¿cómo había de llamarse el hijo de ambos sino Pablito? La parte triste es que Pablito no conocerá a su padre, pues será asesinado en una manifestación, ya que Mario estaba dispuesto a ofrecer su compromiso político con su pueblo, sobre todo como poeta. Después de la vuelta de Neruda a Chile, una vez que puede regresar a su país, Mario se estrena como poeta. Todavía se nos encoge el corazón con este final, ¿verdad?


Os ofrezco unas imágenes del auténtico Pablo Neruda junto a su tercera mujer, Matilde Urrutia. Parece que ya son un poco nuestros después de ver la película, ¿no os parece?
 ¿Y si vamos ilustrándolas con versos de sus poemas?



Pablo Neruda con Matilde Urrutia




TU RISA
Quítame el pan si quieres,
quítame el aire, pero
no me quites tu risa.
No me quites la rosa,
la lanza que desgranas,
el agua que de pronto
estalla en tu alegría,
la repentina ola
de planta que te nace.
Mi lucha es dura y vuelvo
con los ojos cansados
a veces de haber visto
la tierra que no cambia,
pero al entrar tu risa
sube al cielo buscándome
y abre para mí
todas las puertas de la vida.
Amor mío, en la hora
más oscura desgrana
tu risa, y si de pronto
ves que mi sangre mancha
las piedras de la calle,
ríe, porque tu risa
será para mis manos
como una espada fresca.
Junto al mar en otoño,
tu risa debe alzar
su cascada de espuma,
y en primavera, amor,
quiero tu risa como
la flor que yo esperaba,
la flor azul, la rosa
de mi patria sonora.
Ríete de la noche,
del día, de la luna,
ríete de las calles
torcidas de la isla,
ríete de este torpe
muchacho que te quiere,
pero cuando yo abro
los ojos y los cierro,
cuando mis pasos van,
cuando vuelven mis pasos,
niégame el pan, el aire,
la luz, la primavera,
pero tu risa nunca
porque me moriría. 
 
                                                                                     De  Los versos del capitán




El poeta con su esposa Matilde

 

Por favor, no os perdáis, la vesión musical que nos ofrecen Olga Manzano y Manuel Picón, porque es antológica:




 
 DESNUDA

Desnuda eres tan simple como una de tus manos,
lisa, terrestre, mínima, redonda, transparente,
tienes líneas de luna, caminos de manzana,
desnuda eres delgada como el trigo desnudo.

Desnuda eres azul como la noche en Cuba,

tienes enredaderas y estrellas en el pelo,
desnuda eres enorme y amarilla
como el verano en una iglesia de oro.

Desnuda eres pequeña como una de tus uñas,

curva, sutil, rosada hasta que nace el día
y te metes en el subterráneo del mundo

Como en un largo túnel de trajes y trabajos:

Tu claridad se apaga, se viste, se deshoja
Y otra vez vuelve a ser una mano desnuda.





"Amor mío, cuento las horas que me faltan para besar tu boquita adorada. Amor, amor, me haces mas falta que el aire y con el mar, aquí, completas lo mas bello del mundo para mí. " Cartas de amor inéditas a Matilde Urrutia.

                 

Pablo Neruda


Matilde Urrutia




Juegas todos los días con la luz del universo.

Sutil visitadora, llegas en la flor y en el agua.

Eres más que esta blanca cabecita que aprieto

como un racimo entre mis manos cada día.


A nadie te pareces desde que yo te amo.

Déjame tenderte entre guirnaldas amarillas.

Quién escribe tu nombre con letras de humo entre las estrellas del sur? 


Ah déjame recordarte cómo eras entonces, cuando aún no existías.


De pronto el viento aúlla y golpea mi ventana cerrada.

El cielo es una red cuajada de peces sombríos.

Aquí vienen a dar todos los vientos, todos.

Se desviste la lluvia.


Pasan huyendo los pájaros.

El viento. El viento.

Yo sólo puedo luchar contra la fuerza de los hombres.

El temporal arremolina hojas oscuras

y suelta todas las barcas que anoche amarraron al cielo.


Tú estás aquí. Ah tú no huyes.

Tú me responderás hasta el último grito.

Ovíllate a mi lado como si tuvieras miedo.

Sin embargo alguna vez corrió una sombra extraña por tus ojos.


Ahora, ahora también, pequeña, me traes madreselvas,

y tienes hasta los senos perfumados.

Mientras el viento triste galopa matando mariposas

yo te amo, y mi alegría muerde tu boca de ciruela.


Cuanto te habrá dolido acostumbrarte a mí,

a mi alma sola y salvaje, a mi nombre que todos ahuyentan.

Hemos visto arder tantas veces el lucero besándonos los ojos

y sobre nuestras cabezas destorcerse los crepúsculos en abanicos girantes.


Mis palabras llovieron sobre ti acariciándote.

Amé desde hace tiempo tu cuerpo de nácar soleado.

Hasta te creo dueña del universo.

Te traeré de las montañas flores alegres, copihues,

avellanas oscuras, y cestas silvestres de besos.


Quiero hacer contigo

lo que la primavera hace con los cerezos.


 
Poema XIV de Veinte poemas de amor y una canción desesperada



 



El propio Pablo Neruda recita el Poema XIV de Veinte poemas de amor y una canción desesperada.




El matrimonio Neruda-Urrutia




Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.

Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.

Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.

Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.


Del Poema XV de Veinte poemas de amor y una canción desesperada.





Versión musicalizada por Paco Ibáñez del Poema XV de Veinte poemas de amor y una canción desesperada.



Neruda con Matilde




Neruda con Matilde



Poema XX de Veinte poemas de amor y una canción desesperada


Puedo escribir los versos más tristes está noche.
Escribir, por ejemplo: «La noche esta estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos».

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.






Paco Ibáñez musicaliza la versión del poema XX de Veinte poemas de amor y una canción desesperada.






Pablo Neruda recita el poema XX de Veinte poemas de amor y una canción desesperada

Puedo escribir los versos más tristes esta noche...



Estampa familiar
                                            






LA CANCIÓN DESESPERADA

Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy.
El río anuda al mar su lamento obstinado.

Abandonado como los muelles en el alba.
Es la hora de partir, ¡oh abandonado!

Sobre mi corazón llueven frías corolas.
¡Oh sentina de escombros, feroz cueva de náufragos!

En ti se acumularon las guerras y los vuelos.
De ti alzaron las alas los pájaros del canto.

Todo te lo tragaste, como la lejanía.
Como el mar, como el tiempo. ¡Todo en ti fue
naufragio!

Era la alegre hora del asalto y el beso.
La hora del estupor que ardía como un faro.

Ansiedad de piloto, furia de buzo ciego,
turbia embriaguez de amor, ¡todo en ti fue naufragio!

En la infancia de niebla mi alma alada y herida.
Descubridor perdido, todo en ti fue naufragio!

Te ceñiste al dolor, te agarraste al deseo.
Te tumbó la tristeza, ¡todo en ti fue naufragio!

Hice retroceder la muralla de sombra,
anduve más allá del deseo y del acto.

Oh carne, carne mía, mujer que amé y perdí,
a ti en esta hora húmeda, evoco y hago canto.

Como un vaso albergaste la infinita ternura,
y el infinito olvido te trizó como a un vaso.

Era la negra, negra soledad de las islas,
y allí, mujer de amor, me acogieron tus brazos.

Era la sed y el hambre, y tú fuiste la fruta.
Era el duelo y las ruinas, y tú fuiste el milagro.

Ah mujer, no sé cómo pudiste contenerme
en la tierra de tu alma, ¡y en la cruz de tus brazos!

Mi deseo de ti fue el más terrible y corto,
el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido.

Cementerio de besos, aún hay fuego en tus tumbas,
aún los racimos arden picoteados de pájaros.

Oh la boca mordida, oh los besados miembros,
oh los hambrientos dientes, oh los cuerpos trenzados.

Oh la cópula loca de esperanza y esfuerzo
en que nos anudamos y nos desesperamos.

Y la ternura, leve como el agua y la harina.
Y la palabra apenas comenzada en los labios.

Ése fue mi destino y en él viajó mi anhelo,
y en él cayó mi anhelo, ¡todo en ti fue naufragio!

Oh sentina de escombros, en ti todo caía,
qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron.

De tumbo en tumbo aún llameaste y cantaste
de pie como un marino en la proa de un barco.

Aún floreciste en cantos, aún rompiste en corrientes.
Oh sentina de escombros, pozo abierto y amargo.

Pálido buzo ciego, desventurado hondero,
descubridor perdido, ¡todo en ti fue naufragio!

Es la hora de partir, la dura y fría hora
que la noche sujeta a todo horario.

El cinturón ruidoso del mar ciñe la costa.
Surgen frías estrellas, emigran negros pájaros.

Abandonado como los muelles en el alba.
Sólo la sombra trémula se retuerce en mis manos.

Ah más allá de todo. Ah más allá de todo.

Es la hora de partir. ¡Oh abandonado!



                de Veinte poemas de amor y una canción desesperada.


 
 Paco Ibáñez musicaliza La canción desesperada

 

Queridos, después de este banquete de poesías de Neruda, os dejo el vídeo de la película completa de El cartero y Neruda para que la disfrutéis cuando os apetezca. Os espero, un beso.

El cartero y Pablo Neruda, ver


...


12 comentarios:

  1. Hola Helena y compañeros espero que os haya gustado el cartero tanto como a mí me ha emocionado. Ya el entorno es fantástico una pequeña isla de pescadores con unos paisajes maravillosos de montañas y acantilados golpeados por un mar azul y un cielo limpio,te ponen en situación para entrar en el mundo de la imaginación. La austeridad y las miserias del ser humano que te arrancan sentimientos encontrados por el menosprecio hacia personas que por su incultura son manipulados por políticos y hacendados que abusan de su ignorancia, miedos y miserias, te hacen revelarte ante las injusticias. La amistad de Mario con el poeta le lleva a un mundo de sentimientos en el que la poesía lo envuelve por completo, y más aun cuando el amor nace y gira todo entorno a él, la humildad, la pureza, la sencillez, la belleza y la pasión todo metido en un grano de arena tan grandioso como el Universo.
    La despedida de un amigo y la ingrata espera del reencuentro junto con desilusión por unas pocas palabras en una carta y las intolerancias de ideas marcan un final trágico de Mario.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mi querido amigo:

      Creo saber quién eres, pero te ruego que me lo confirmes. Muchísimas gracias por tus preciosas palabras sobre esta película que hemos compartido desde la emoción profunda, como bien dices arropados por el telón de fondo de las montañas, las de piedra y las de agua, intensamente azules y cálidas como el sur de Italia y como los poemas de amor de Neruda.

      Cuánto me ha gustado tu análisis sobre la implicación política de Mario. Qué buena crítica la tuya hacia aquellos que pretenden valerse de la humildad y del desconocimiento de las buenas gentes para su provecho. En estas circunstancias terribles es cuando aflora lo mejor y lo peor del ser humano, y nuestro protagonista, sin duda, nos ha ganado. Claro, que su amigo, el poeta, don Pablo nos ha fascinado con su maestría y su afecto, ¡menudos versos!, ¡qué poeta!

      Qué belleza de historia, de personajes entrañables y de metáforas.

      Gracias por tu interés y por tu profundo comentario. Un beso.

      Eliminar
  2. Incansable seria su apellido !querida Helena!
    Después de un día incansable de clases y actividades culturales aquí esta comentado la película.
    Maravillosa película que disfrute quizás por el momento, todo en esta vida tiene su momento como el estudiar, para mi este es el mejor momento, el cual estoy disfrutando mucho.Gran película de amor, pero sobre todo de amistad. Una amistad entre Neruda y su cartero, que despierta en el cartero inquietudes que quizás no sabia que tenia. Y le descubre un mundo nuevo en el cual escapar de esa realidad que no va con él. Muchas gracias por hacernos disfrutar de la literatura.
    Calisto

    ResponderEliminar
  3. Queridísima Calisto:

    Hablo en femenino, ¿acierto? Muchas gracias por tus generosas palabras. Qué profundo tu análisis del tiempo, es cierto, cada expresión de la vida, desde la humana a las académica, tiene su momento.
    Todo nos llega en el momento adecuado, pues hemos aprendido de las experiencias previas que nos llevan a comprender con la profundidad del alma, aquello que vislumbramos.

    Este es también un momento especial para mí. ¿Recuerdas cuando hablamos de la comunicación? solo es real cundo el receptor está predispuesto a serlo, entonces ocurre la magia, porque se actualizan poemas, novelas, dramas, películas... arte en toda su extensión, obras que esperan ese momento: el de encontrar a la persona adecuada que los supiera recibir y sentir. Para mí haber visto esta película con vosotros me ha provocado una emoción especial, por eso me hacía tanta ilusión realizar esta entrada.

    Cuánto me alegro de que este sea también para ti un momento pleno y feliz. Recuerda que la literatura te esperaba, quizá nada sea casual...

    Para ti, Calisto, encanto de persona, este poema que viene de un autor que sabe cultivar como nadie la amistad a través de sus versos, José Martí:

    "Yo soy un hombre sincero
    de donde crece la palma,
    y antes de morirme quiero
    echar mis versos del alma.

    Yo vengo de todas partes,
    y hacia todas partes voy:
    arte soy entre las artes,
    en los montes, monte soy.

    Yo sé los nombres extraños
    de las yerbas y las flores,
    y de mortales engaños,
    y de sublimes dolores.

    Yo he visto en la noche oscura
    llover sobre mi cabeza
    los rayos de lumbre pura
    de la divina belleza.

    Alas nacer vi en los hombros
    de las mujeres hermosas:
    y salir de los escombros
    volando las mariposas.

    He visto vivir a un hombre
    con el puñal al costado,
    sin decir jamás el nombre
    de aquella que lo ha matado.

    Rápida, como un reflejo,
    dos veces vi el alma, dos:
    cuando murió el pobre viejo,
    cuando ella me dijo adiós.

    Temblé una vez, —en la reja,
    a la entrada de la viña—
    uando la bárbara abeja
    picó en la frente a mi niña.

    Gocé una vez, de tal suerte
    que gocé cual nunca: —cuando
    la sentencia de mi muerte
    leyó el alcaide llorando.

    Oigo un suspiro, a través
    de las tierras y la mar,
    y no es un suspiro, —es
    que mi hijo va a despertar.

    Yo he visto al águila herida
    volar al azul sereno,
    y morir en su guarida
    la víbora del veneno.

    Si dicen que del joyero
    tome la joya mejor,
    tomo a un amigo sincero
    y pongo a un lado el amor."

    Calisto de mi alma, muchísimas gracias, espero que te guste el poema y recuerda que personas como tú son las que hacen que los sueños de los autores relumbren como joyas.

    Por cierto, como disfruté aprendiendo sobre estrellas y constelaciones, como aquella tan hermosa, la de Calisto. Un beso.

    ResponderEliminar
  4. Precioso poema y preciosa constelación la osa mayor.
    Gracias

    ResponderEliminar
  5. maravilloso el comentario del anonimo sobre la pelicula, no se perdio detalle, un sobresaliente para ella

    ResponderEliminar
  6. Querida Carmeli:

    A mí también me fascinó su comentario porque está cargado de significados, pero lo que más me atrajo de este comentario ha sido la elegancia con la que ha expuesto las ideas de la historia:

    "cuando el amor nace y gira todo en torno a él, la humildad, la pureza, la sencillez, la belleza y la pasión todo metido en un grano de arena tan grandioso como el Universo."

    Nuestro anónimo sin duda ama la poesía. ¡Anónimo, por favor, manifiéstate!

    Gracias, Carmeli.

    ResponderEliminar
  7. Hola buenas noches Elena, soy José Vicente y he hecho un hueco mientras estaba estudiando para hacer un comentario sobre la triste desaparición del Inestimable Nelson Mandela el cual descanse en paz. Es una verdadera lástima que en este miserable mundo lleno de intereses y de miseria el cual el hombre no mira más que su propio interés no nos demos cuenta de los valores del ser humano y solo miremos el egoísmo nuestro. Esta maravilla de persona se ha dejado la vida por la igualdad de las persona, no importa el color la raza la religión sus tendencias políticas su sistema económico, el solo miraba la faceta humana de cada persona pero admiraba a las personas por lo que eran, no por lo que poseían o dejaran de poseer. Se paso la friolera de 27 años en una celda claustrofóbica fue perseguido, por personajillos de tres al cuarto que se creen los amos del mundo sin importarles nada e incluso sin saber lo más minímo de la persona a la que están enjuiciandoOjalá que salgan muchos más Nelson Mandela en este jodido mundo en el cual no miramos nada más que por nuestros intereses. Muchas gracias Elena por las pastas que nos distes en clase.

    ResponderEliminar
  8. Te agradezo muchísimo, querido José Vicente esta intervención necesaria, justa y verdadera. Personas, realmente gigantes, que nos brindan un legado extraordinario desde su modelo de vida, son las que hacen que la humanidad avance y comience a entender lo que significa la vida.

    Contra viento y marea el gigante Mandela realizó su viaje de héroe humilde, bondadoso, filántropo, amante de todos los seres humanos, espíritu de concordia, de superación de odios y rencores.

    Ante el mundo entero ha mostrado la diferencia entre la grandeza moral, con un enorme corazón y el poder terrible de los que detentan los medios económicos a través de la represión y el egoísmo profundo . Hoy todo el mundo llora, todo el mundo quiere a Nelson Mandela.

    Hoy y para siempre el mundo es un poco mejor después de que el gigante Mandela nos haya mostrado los pasos necesarios para los hombres. Hoy un poquito solos, tremendamente tristes, entendemos el testigo que él nos deja.

    Descanse en paz el hombre, continúe su espíritu entre nosotros para darnos fuerza con su ejemplo histórico. Bendito sea ese gigante con el que hemos coincido durante un instante en la gota del tiempo cósmico.

    Gracias, a ti, querido José Vicente por empezar a compartir la emoción que hoy nos embarga a todos. Muchísimas gracias, ello ya dice mucho del corazón tan grande del que tú también eres portador.

    Un abrazo de una humilde discípula tuya.

    ResponderEliminar
  9. Felices fiestas Elena. Espero que hayas pasado una Buena noche Buena en compañía de todos tus familiares, y que te haya tocado la lotería. El comentario que te voy a comentar. aún siendo navidades, es la otra cara de las mismas. Me explico. Íbamos ayer por la tarde con unos amigos dando un paseo por Madrid para que las niñas vieran las luces y los adornos navideños que hay en el centro, y cuando nos metimos en la plaza mayor había dos hombres tapados con cartón y una manta tirados en el suelo y a su suerte. Esto me hizo reflexionar y pensar cual injusta es la vida de estas personas a las cuales la sociedad en la mayoría de los casos (con esto yo no digo que no haya gente que no se preocupe de estas personas) no se les hace el menor caso. Yo como ciudadano solamente pido un poco más de solidaridad con personas que están en la calle y que necesitan ayuda de verdad. Es una verdadera lastima que en una sociedad moderna las autoridades sigan consintiendo esta situación caótica de personas que no tienen medios para subsistir. Bueno Elena espero que te guste este comentario dramático pero a mi juicio necesario aunque estemos en Navidad. Felices fiestas José Vicente

    ResponderEliminar
  10. Quiero pedir perdón a Pablo Neruda en su poema numero 20, que una vez utilicé en el dolor .
    Lo llamé poema 21 . Aprovecho este pequeño homenaje para él con "El cartero y Neruda".

    POEMA 21.
    (Para Miguel)
    Puedo sentir el dolor más triste esta noche.

    Sentir, por ejemplo: «La noche está estrellada,
    y sus ojos verdes, brillan, a lo lejos.»

    El viento de la noche gira en el cielo y canta.

    Puedo sentir el dolor más triste esta noche...
    Yo le quise, y él también me quiso.

    En noches como ésta, me tuvo entre sus brazos.
    Me besó tantas veces bajo el cielo infinito.

    Él me quiso, yo también le quería.
    Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

    Puedo sentir el dolor más triste esta noche.
    Pensar que no le tengo. Sentir que le he perdido.

    Oír la soledad inmensa, más inmensa sin el.
    Y el dolor cae al alma como el pasto al rocío.

    Qué importa que mi dolor no pudiera guardarlo.
    La noche está estrellada y él… no está conmigo.

    Eso fue todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
    Mi alma no se contenta con haberlo perdido.

    Como para recordarlo mi mirada le busca.
    Mi corazón le busca, y el ya no está conmigo.

    La misma ausencia que hace golpear, los mismos sentimientos.
    Nosotros, los de antes, nunca seremos los mismos.


    Yo le quiero, es cierto, y cuánto le quise.
    Mi voz buscaba sus labios, y sus sueños los míos.

    De Dios serás, de Dios. Como antes de mis versos.
    Su voz, Su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.


    Es tan fácil el amor, y es tan difícil el olvido.
    Porque en noches como esta me tuvo entre sus brazos,
    Mi alma no se contenta con haberlo perdido

    Pero éste no será, último dolor que ello me cause.
    Ni éstos serán, los últimos versos que yo le dedico.

    ResponderEliminar
  11. Querida Sigorita:

    Nunca había tenido tanta verdad el poema de Pablo Neruda, que por cierto, creo que te debe adorar, y en absoluto estar ofendido contigo, pues su alma poética nos acompaña.
    Me ha producido una inquietud muy grande este homenaje, por su belleza indudable, por su cercanía, así como por su desazón. El poema del dolor 21 se clava en el costado fuertemente cuando aseveras"

    "Pero éste no será, último dolor que ello me cause.
    Ni éstos serán, los últimos versos que yo le dedico".

    Pues la sinceridad descarnada presenta al dolor de una sola pieza y así hay que contemplarlo y absorberlo, como si tal cosa.

    "De Dios serás, de Dios. Como antes de mis versos".

    Esta es nuestra Sigorita. Dios nos la bendiga, pues suya es la voz y suya es el alma poética.
    Para siempre, poema 21 de los 20 poemas de amor. Un abrazo, maestra.

    ResponderEliminar

Tu comentario nos enriquecerá